En Estados Unidos se produce un delito violento cada 26 segundos, según el “Reloj del Crimen” del FBI. Por ello, la reducción de la delincuencia en las zonas metropolitanas y suburbanas
zonas es posiblemente la mayor prioridad para los municipios y las fuerzas del orden. Cuando se trata de proteger las ciudades y mejorar la seguridad pública, las soluciones de audio son esenciales. Esto es especialmente cierto cuando se trata de entregar información crítica a los primeros intervinientes. El sonido suele ser uno de los primeros indicadores de que algo va mal para los primeros en responder.
Añadir audio a una solución de vigilancia es el primer paso en la implantación de la seguridad de las ciudades inteligentes. Las soluciones de audio unidireccionales y bidireccionales permiten una supervisión proactiva y en tiempo real. Además, los detectores de sonido ayudan al personal de seguridad de la ciudad y a las fuerzas del orden a identificar los eventos acústicos comúnmente asociados a los delitos, alertando a los primeros en responder antes de que una situación precaria alcance su máximo potencial.